jueves, 14 de junio de 2007

legumbres


Hemos hecho un mural con habas, guisantes y judias.
Si quieres leer el cuento de la princesa y el guisante lo encontrarás en la siguiente dirección:
http://www.hadaluna.com/andersen/a-guisante.htm

bulbos


En el huerto hemos cultivado ajos, tulipanes y cebollas.
Hemos preparado un mural con un ejemplo de cada uno de ellos.
Las cebolla tiene flor porque es del año pasado.

lunes, 11 de junio de 2007

siega


Los de infantil hemos acompañado a la gallina roja para realizar la siega del cereal.
Hemos efectuado la siega del trigo con la ayuda de la hoz y una zoqueta para protegernos los dedos.
Mágicamente de la bolsa al meter las espigas de trigo han salido galletas.
Tambien hemos probado los guisantes. Estaban muy buenos.
Hemos visto a un abejorro libando en las flores de los girasoles.

martes, 5 de junio de 2007

Los cereales


En el huerto hemos sembrado cereales: trigo , cebada, maiz... Hoy vamos a comenzar haciendo una exposición de las plantas del huerto, comenzamos por ellos, porque han sido la base de la alimentación de la humanidad.
De ellos obtenemos numerosos alimentos (pan, pasta, cereales, pastas, palomitas...)
Puedes encontrar muchas mas cosas en http://es.wikipedia.org/wiki/Cereal

La gallina roja.

Había una vez una gallina roja llamada Marcelina, que vivía en una granja rodeada de muchos animales. Era una granja muy grande, en medio del campo. En el establo vivían las vacas y los caballos; los cerdos tenían su propia cochiquera. Había hasta un estanque con patos y un corral con muchas gallinas. Había en la granja también una familia de granjeros que cuidaba de todos los animales.
Un día la gallinita roja, escarbando en la tierra de la granja, encontró un grano de trigo. Pensó que si lo sembraba crecería y después podría hacer pan para ella y todos sus amigos.
-¿Quién me ayudará a sembrar el trigo? les preguntó.
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, pues lo sembraré yo, dijo la gallinita.

Y así, Marcelina sembró sola su grano de trigo con mucho cuidado. Abrió un agujerito en la tierra y lo tapó. Pasó algún tiempo y al cabo el trigo creció y maduró, convirtiéndose en una bonita planta.
-¿Quién me ayudará a segar el trigo? preguntó la gallinita roja.
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, si no me queréis ayudar, lo segaré yo, exclamó Marcelina.

Y la gallina, con mucho esfuerzo, segó ella sola el trigo. Tuvo que cortar con su piquito uno a uno todos los tallos. Cuando acabó, habló muy cansada a sus compañeros:
-¿Quién me ayudará a trillar el trigo?
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, lo trillaré yo.

Estaba muy enfadada con los otros animales, así que se puso ella sola a trillarlo. Lo trituró con paciencia hasta que consiguió separar el grano de la paja. Cuando acabó, volvió a preguntar:
-¿Quién me ayudará a llevar el trigo al molino para convertirlo en harina?
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, lo llevaré y lo amasaré yo, contestó Marcelina.

Y con la harina hizo una hermosa y jugosa barra de pan. Cuando la tuvo terminada, muy tranquilamente preguntó:
- Y ahora, ¿quién comerá la barra de pan? volvió a preguntar la gallinita roja.
-¡Yo, yo! dijo el pato.
-¡Yo, yo! dijo el gato.
-¡Yo, yo! dijo el perro.
-¡Pues NO os la comeréis ninguno de vosotros! contestó Marcelina. Me la comeré yo, con todos mis hijos. Y así lo hizo. Llamó a sus pollitos y la compartió con ellos.